Los ángeles y los demonios habían luchado durante mucho tiempo para ver quién reinaba. Para poner fin a esta disputa, un ángel llamado Sera y un demonio llamado Firika fueron enviados al mundo de los humanos para terminar esta competición disputándose el amor de un humano llamado Yamato. Así, Sera y Firika compiten por el amor de Yamato y la supremacía de toda su raza, a través de cualquier medio necesario.