Preocupada por su figura rellenita, Nagai-san decide apuntarse a un gimnasio para perder peso.
Empezando con estiramientos, su voluptuoso cuerpo es examinado de cerca por los demás miembros.
Su entrepierna, húmeda por la excitación, es examinada minuciosamente en una postura con las piernas abiertas, lo que la hace correrse.
A continuación, el entrenador le agarra la garganta y la empuja violentamente antes de eyacular profundamente en su garganta.
Con las piernas abiertas como una rana en la máquina de press de pecho, a Nagai-san le clavan una polla gruesa y cruda.
Aunque nerviosa y agitada por la excitación ante una polla inesperadamente enorme, al principio apenas mantiene la cordura. Pero cuando le golpean el cuello del útero, no puede rechazar el creampie, sino que lo suplica, llenándose hasta los topes de espeso semen.