Cuando Kumi y sus amigas Reina y Mari juegan con una tabla de brujería, invocan accidentalmente a un fantasma malévolo. El fantasma posee a las chicas y las utiliza para robar la energía sexual de la gente. Pronto, Kumi deja de actuar por su propia voluntad y busca inconscientemente sexo con hombres. Asustada, Kumi busca el consejo de una exorcista, Tsunoda Mia. Mientras tanto, un violador con poderes sobrenaturales anda suelto. Cuando la exorcista Mia investiga, descubre a un hombre con un insaciable apetito sexual que busca satisfacer en la muerte la lujuria que no pudo en vida.